Experiencia 1: Holders

Mariano de Diego
3 min readOct 28, 2020
Cofre donde “almacenar” tus activos (ver ref.).

Hace más de 7 años compré mi primer minero. En esa época surgían los primeros sistemas ASIC. Hardware dedicado de empresas desconocidas, específico para descifrar contraseñas. Minería de la buena.

Pensé que era un timo. Pero por esa época cobraba ya un sueldo decente y tenía poco gasto, así que invertí 300 € en un minero de la empresa Butterfly Labs.

En pocos meses miné casi 1 bitcoin (~0,7 BTC) , el cual utilicé para experimentar. Con el crecimiento de la dificultad, mes a mes, mi minero dejaba de ser rentable al precio que estaba entonces la criptomoneda (otoño de 2013). Pero a mi me daba igual. Era más un reto tecnológico que otra cosa.

El Primer Salto

Y, de repente, en enero de 2014, en una tarde, 1 BTC pasó de valer unos 100 $ a 1.000 $. De un salto. ¡BOOOM! Mis 0,7 BTC habían doblado el precio del minero en una sola tarde. Inversión amortizada. Saqué 300 $ y el resto lo dejé para experimentar.

Ese fue el principio de todo.

Al día siguiente intenté convencer a mis compañeros de trabajo en invertir 4.000 $ en un minero ASIC más potente. Conseguiríamos recuperar la inversión en menos de 1 año. Mucho riesgo, y yo no tenía el dinero (ni el valor), para invertirlo yo solo.

El tiempo paso. El BTC se fue enfriando. Yo hice una copia de seguridad de mis claves en un pendrive y me olvidé. Hasta 2017.

Segundo Salto

A partir de las navidades de 2017 el precio del Bitcoin, literalmente, se disparó. Pasó, en 4 meses, de valer 1.000 $ a la friolera de 20.000 $.

BTC disparándose por las nubes en 2017–2018.

De repente, mis 0,7 BTC ya no valían 700 $. En cuestión de meses, habían pasado a valer 14.000 $. Rápidamente me lance a buscar mi antiguo pendrive con mis claves.

Tristemente, ¡no había salvado las claves correctamente años atrás! No podía recuperar mi dinero. Había quedado tristemente atrapado en una dirección pública, sin posibilidad de acceso.

Dirección pública con mis bitcoins, sin posible acceso :(

Desde entonces, cada cierto tiempo, intento recuperarlos. Hoy opero de otra manera, claro: copias de seguridad, llaveros hardware, software, etc. ¿Qué hubiera pasado si hubiéramos comprado el minero necesario para conseguir 4 BTCs en 2014? Posiblemente nada. O posiblemente hoy 3 amigos fuésemos millonarios.

Nunca lo sabremos.

Holders y Moraleja

Los llamados holders son aquellas personas que mantienen sus activos. Poseedores sería la traducción al castellano. Esta “estrategia” de inversión se basa en una premisa sencilla: los mercados a largo plazo siempre tienden a subir.

Existe un porcentaje elevado de cryto-holders que lo único que hacen es comprar crytomoneda (BTC, ETH, etc.) y almacenarla con el objetivo de recuperarla dentro de varios años, cuando el mercado las haya revalorizado.

En el caso del Bitcoin, dicha premisa es más clara ya que, desde su diseño, se especificó un límite en la cantidad de moneda disponible (21 Millones). De esta forma, si cada vez existen más usuarios o holders, más se revalorizará. A mas demanda, menos oferta. Sencillo.

Moraleja

Conserva tus contraseñas en lugar seguro. ¿Cómo? En otro post.

La foto de la portada es una foto de Fondo creado por freepik, y disponible en freepik — www.freepik.es

--

--

Mariano de Diego
0 Followers

Hola! Soy Mariano, un ingeniero electrónico tocado por la curiosidad y el interés por el software. En este espacio intento ordenar mis ideas sobre blockchain.